Bueno, es sólo que yo quería que estuviera ahí.
A la derecha un poco, con aquella imagen en la esquina.
Irregular.
Que yo me mirara algunas veces,
que tú dejaras tus gafas encima de la caja azul,
que me permitiera observarte de reojo mientras piensas.
Es sólo eso. Pero ya está.
El corte ha sido sencillamente perfecto.
No es recto, ni mucho menos. Es una pequeña cresta.
Pero no hace daño, puedes tocarlo como acariciarías a un animal manso.
Es más peligrosa, créeme, una hoja de papel.
En realidad no pasa nada.
Seguramente te preguntas por qué he insistido tanto,
y en verdad te digo que no lo sé.
Sólo quería que estuviera ahí. Bueno, me he equivocado.
Pero me permitía reconocerme las veces con más suerte,
y también que tú me vieras mientras te abrazo,
y también hacer un juego de espejos.
Pero no pasa nada. Es sólo que. Bueno.
¿Tenía que ocurrir ahora?
Mirall trencat
Egon Schiele
Quizás no estabas equivocada, no? y ese debería ser su lugar.
Buen monólogo Fusa.
Besosss
Me han gustado tus letras, hasta tal punto que sigo aquí y me tendrás como un asiduo visitante.
Te saludo desde Colombia y te extiendo invitación para que visites mi Galería de letras. Un abrazo.